Redes que liberan y salvan
El Papa pronuncia el tercer llamamiento en español: «vayan a reparar las redes». No solo a remendarlas, sino también a construir otras nuevas.
Redes de relaciones, redes de amor, redes de intercambio gratuito, en las que la amistad sea profunda. Redes donde se pueda reparar lo que ha sido roto, donde se pueda poner remedio a la soledad, sin importar el número de los seguidores [follower], sino experimentando en cada encuentro la grandeza infinita del Amor. Redes que abran espacio al otro, más que a sí mismos, donde ninguna “burbuja de filtros” pueda apagar la voz de los más débiles. Redes que liberen, que salven. Redes que nos hagan redescubrir la belleza de mirarnos a los ojos. Redes de verdad. De este modo, cada historia de bien compartido será el nudo de una única e inmensa red: la red de redes, la red de Dios.